Diario de Milar Vea (5)

“Magia potagia” Sport
“El Milar Vea, liderado por un soberbio Alex apabulla al Flower” USA Today
“Alex y Ortega, ¿la pareja perfecta?” Aquí hay tomate magazine
“Kim y las 40 camisinhas” Cuore
“La fábrica de sueños” Superdeporte
“Raúl es el mejor y el Barça una basura” MARCA -----------------------------------------------

Hay ocasiones únicas en la vida de una persona en las que por alguna extraña razón los astros se alinean a su favor y la suerte les sonríe hasta más no poder. Algo así sentimos los componentes del Milar Vea ayer en el coliseo Dos a Dos tras vencer por 6 - 1 al Flower, que de flower solo tenían el nombre porque repartían leña hasta en el vestuario. La verdad es que fue un partido en el que todo salió a la perfección, cada uno de los jugadores estuvimos a un nivel muy alto y la concentración no se perdió en casi ningún momento. Por otra parte, el equipo rival tuvo uno de esos días tontos y el árbitro nos favoreció ligeramente con algunas de sus decisiones aunque para nada tuvo influencia en el partido. Nos adelantamos pronto con un magnifico gol desde la frontal de Bruno que además del gol cuajo un excelente partido en todas las facetas del juego. No obstante, no puedo evitar hacer referencia a que tuvimos que cambiar de balón tras el gol ya que la uña de Bruno había quedado clavada en el cuero pinchándolo de inmediato. Nuestro dominio fue constante y era cuestión de minutos que llegaran más tantos a nuestro favor. Tras un par de ocasiones marradas por Beto y por mi mismo llegó uno de los momentos más especiales de la temporada… Un balón largo y mal metido a la espalda de la defensa fue luchado incansablemente por la gran estrella del partido, de la temporada y de toda la historia (yo) y tras un ligero error del portero rival que no acertó a blocar, metí el pie y anoté el segundo tanto a puerta vacía. Lo celebré realizando la metralleta, una celebración de tal clase que solo está permitida a los más grandes del deporte rey. Pero la demostración de poderío no quedó solo ahí, tras un buen gol de Ortega, anoté el cuarto del partido y el segundo en mi cuenta particular aprovechando un pase al hueco elevando el esférico por encima del meta rival con una suavidad solo comparable a la de la piel del culo de un bebé. La metralleta volvió a dejarse ver. En medio de esa imparable tormenta de jogo bonito que desplegamos durante la primera mitad, llegaron numerosas ocasiones a nuestro favor y ninguna en contra. Habíamos controlado todo el partido sin ningún problema y encima estábamos luciéndonos. El temor a una muy deshonrosa remontada nos concentramos en no bajar la intensidad y así fue como pese al gol del Flower tras error de la zaga del Milar Vea volvimos a meter quinta como el Madrid de Schuster y anotamos dos goles más que acabaron con el partido y que sumieron al Flower en una profunda crisis que traslució a través de sus enfados con el colegiado y sus feas entradas. El primero de esos goles, el quinto del Milar Vea, llevó la firma de Ortega y es el de más bella factura hasta la fecha ya que se trató de un precioso empalme a la escuadra de la meta rival. El gol situaba a Ortega como pichichi del equipo con tres tantos en cuatro partidos disputados, cerca de un gol por partido de media. Sin duda una de las piezas claves del Milar Vea. El último gol fue de Olmos y puso la guinda al fantástico partido que realizó el prodigioso diestro valenciano demostrando una vez más su garra y polivalencia. El gol vino precedido de una horrorosa entrada sobre Beto que se revolvió de mala manera acción por la que vio una merecida tarjeta azul. En resumen, fue un magnífico encuentro dominado de cabo a rabo por un equipo que llegaba como 14º clasificado y que toreó sin ninguna piedad al 8º clasificado de la general. El Milar Vea ha inaugurado su fábrica de magia, esperemos que nunca pare las máquinas, la afición lo agradecerá. p.d: Las puntuaciones mañana que sino se hace muy largo.

Álex González.